Como buen argentino, Franco es un fanático del fútbol. Su corazón pertenece a Boca Juniors, y sigue al club con devoción, sin importar dónde lo lleve su carrera. Lo verás a menudo con ropa de Boca en el paddock, celebrando sus victorias y mostrando con orgullo su pasión por el azul y oro. Si no fuera piloto de carreras, ¡es probable que lo encontrarás jugando al fútbol en lugar de estar en el circuito!